Existen cuatro grados de iniciación mencionados en las obras exotéricas, los cuales son respectivamente conocidos en sánscrito como Srôtâpanna, Sakridâgâmin y Arhat; teniendo las mismas denominaciones, en esta nuestra Cuarta Ronda, los Cuatro Senderos que conducen al Nirvâna. El Arhat, si bien puede contemplar el Pasado, el Presente y el Futuro, no es todavía el más alto Iniciado; pues el Adepto mismo, el candidato iniciado, se convierte en Chela (discípulo) de un Iniciado más elevado. Tres grados superiores más le quedan por conquistar al Arhat que quiera alcanzar la cúspide de la escala del Arhatado. Los hay que aun lo han alcanzado en esta nuestra Quinta Raza; pero las facultades necesarias para lograr estos grados más elevados, tan sólo se encontrarán plenamente desarrolladas en el tipo general del asceta, al final de esta Raza Raíz, y en las Sexta y Séptima. Así es que existirán siempre Iniciados y Profanos hasta el final de este Manvántara menor, el presente Ciclo de Vida. Los Arhats de la “Niebla de Fuego”, los del séptimo peldaño, hállanse tan sólo a un paso de la Raíz Fundamental de su Jerarquía, la más elevada que existe en la Tierra y en nuestra Cadena Terrestre. Esta “Raíz Fundamental” tiene un nombre que puede ser traducido tan sólo por medio de varias palabras: el “Baniano-Humano siempre Viviente”. Este “Ser Maravilloso” descendió de una “elevada región” -dicen- durante la primera porción de la Tercera Época, antes de la separación de sexos en la Tercera Raza.
Era al principio un Ser Maravilloso, llamado el “Iniciador”, y después de
él un grupo de Seres semihumanos, semidivinos. “Elegidos” en la génesis arcaica con ciertos propósitos,
se dice que en ellos encarnaron los más elevados Dhyânis - “Munis y Rishis de
Manvántaras anteriores”-, para formar el
semillero de futuros Adeptos humanos, en esta tierra y durante el Ciclo presente.
Estos “Hijos de la Voluntad y del Yoga”, nacidos, por decirlo así, de un modo
inmaculado, permanecieron, según se explica, aparte por completo del resto de
la humanidad.
Doctrina Secreta- Tomo I- H.P. Blavatsky
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