Entrada destacada

Cartas de los Mahatmas-fragmentos

Uno de  los  Maestros  dijo  que,  en  el  mundo  de  hoy,  donde  se  encuentran  tan  pocos  que  tengan   deseos   desinteresados  p...

jueves, 17 de abril de 2008

EL MISTERIO DEL FUEGO





El fuego en cada uno de los sistemas filosóficos y religiosos, aun en el Cristianismo, ha representado el Espíritu de la Deidad, el principio activo, masculino y generador; y el éter, o el Alma de la materia, la luz del fuego simbolizando el principio femenino pasivo, del cual han emanado todas las cosas de este Universo. De ahí que el éter o agua sea la Madre, y el fuego el Padre.

Tú separarás la tierra del fuego, lo sutil de lo sólido..., lo que asciende de la tierra a los cielos y desciende de nuevo de los cielos a la tierra... Ella (la luz sutil) es la potencia de cada fuerza, puesto que domina todas las cosas sutiles y penetra en todo lo sólido. Así fue formado el mundo.


El Fuego, el creador, el conservador y el destructor; de la Luz, la esencia de nuestros divinos antecesores; de la Llama, el Alma de las cosas. La Electricidad es la Vida Una en el peldaño superior del Ser, y el Fluido Astral, el Athanor de los alquimistas, en el inferior.


Es el Fuego Sagrado de Zoroastro, o el Atash-Behram de los parsis; el fuego de Hermes, el fuego de Elmes de los antiguos alemanes; el Relámpago de Cibeles; la Antorcha encendida de Apolo; la Llama en el altar de Pan; el Fuego inextinguible del templo de la Acrópolis y del de Vesta; la Llama de fuego del yelmo de Plutón; las Chispas brillantes en los tocados de los Dióscuros, en la cabeza de la Gorgona, en el yelmo de Palas y en el báculo de Mercurio; el Ptah-Ra egipcio; el Zeus Cataibates griego (el descendiente) de Pausanias; las Lenguas de Fuego de Pentecostés; la Zarza ardiente de Moisés; el Pilar de Fuego del Éxodo y la Lámpara encendida de Abraham; el Fuego Eterno del “abismo sin fondo”; los vapores del oráculo de Delfos; la Luz Sideral de los rosacruces; el Âkâsha de los Adeptos indos; la Luz Astral de Eliphas Lévi; el Aura Nerviosa y el Fluido de los magnetizadores; el Od de Reichenbach; el Psychod y Fuerza Ecténica de Thury; la “Fuerza Psíquica” de Sergeant Cox, y el magnetismo atmosférico de algunos naturalistas; el galvanismo, y por último, la electricidad; todos estos no son sino nombres distintos para diferentes manifestaciones o efectos de la misma Causa misteriosa que todos lo compenetra, al Archaeus griego.


El Fuego es la reflexión más perfecta y no adulterada, tanto en los Cielos como en la Tierra, de la Llama Una. Es la Vida y la Muerte, el origen y el fin de todas las cosas materiales. Es Substancia divina.

El primero después del Uno, es el Fuego Divino; el segundo, el Fuego y el Éter; el tercero está compuesto de Fuego, Éter y Agua; el cuarto, de Fuego, Éter, Agua y Aire. El Uno no se halla relacionado con los Globos poblados de hombres, sino con las Esferas internas invisibles. El Primogénito es la VIDA, el Corazón y el Pulso del Universo; el Segundo es su MENTE o Conciencia.




Doctrina Secreta - Tomo I y II - H.P.B.

No hay comentarios: